16 jun 2010

Capítulo 14


Cómo puedo ser tan imbécil de aguantar a este tío, joder”. Se le escapó el pensamiento en viva voz tras cerrar el móvil y un enfermero se la quedó mirando.

Continuará

34 comentarios:

Marcos Alonso dijo...

He oído algunos gritos, aún no se si ha marcado España, pero pasaba por aquí y he visto el capítulo 14!, no he podido resistirlo y me he puesto a leerlo. Está muy bien, como era de esperar. Volveré a comentar cuando regrese de Sudáfrica. Un abrazo.

Ángeles Hernández dijo...

La primera impresión, ya sabes, la de la rápida lectura, la que nos provoca la emoción sin el análisis:
Estupendo. Mejor dicho, me ha gustado mucho. De una manera sencilla y ágil nos pones en su sitio a cuatro personajes, sobre todo a los más misteriosos: el padre de Jack y Amy.

Este capítulo me ha dado una gran sensación de paz y de relax al ir entendiendo muchas cosas que no acababa de ver claras. Has conseguido dar credibilidad a
un gran número de acontecimientos dispersos que se nos estaban quedando en el aire.

Seguiremos comentando, como siempre, todos los detalles importantes que nos descubres pero para empezar : Enhorabuena, no lo tenías fácil y lo has conseguido.

(Cuando acabe el partido irán entrando los demás, hay mucha tela que cortar en esta entrada).

Un abrazo y te repito mi entusiasmo

Anabel dijo...

O sea ¿la culpa la tenía el fútbol?

Y yo preocupada porque no había comentarios, pensando que había sido un gran fiasco y nadie se atrevía a decírmelo.

¡Desbancada por unos tíos en calzoncillos persiguiendo una pelota!

Bueno, todo sea por la roja. Hala, me voy a ver el partido yo también, que ni me había enterado...

Gracias, Marcos. Disfruta del partido sin prisas.

Gracias, Ángeles. No sé si a esta luciérnaga le queda algo de luz, pero lo he intentado. Espero tu análisis en profundidad.

¡Arriba la roja!

Flamenco Rojo dijo...

Mejor...mucho mejor el color de la novela que el de la roja. Vaya chasco que nos hemos llevado con la selección. Una curita de humildad que diría mi abuela. Afortunadamente con tu capítulo me has alegrado la tarde. Muy completo...se nos aclaran muchas dudas.

Abrazos rojos y negros.

Isolda Wagner dijo...

Lo sabía, Anabel. Es lo que tiene los cuarteles de invierno!
Me ha gustado mucho, se aclaran cosas fundamentales para el buen gobierno de las otras plumas. Ahora entendemos el doble trabajo de Déborah; sabemos dónde comenzó todo: con una historia de amor entre Amy y Donaldson padre.(Como todo en la vida, por otra parte, amor u odio)
Me pongo en el lugar de Deborah y me digo lo mismo, - cómo puedes aguantar a un tipo, que nada más conocerte, te llama bonita- (a saber lo que sería en el original, honey, baby...) Menos mal que ya la tenemos como se merece, en el pecado lleva la penitencia; ahí sigue, en un hospital, hasta las narices de Jack y sin saber a qué atenerse. ¿O sí?
La historis promete y mucho.
Un beso fuerte a la Cuentista y otros 6.

Mercedes Pinto dijo...

Con esta entrega se han disipado muchas de mis dudas. Así que el interés del padre de Jack no es más que la propia Amy, que le gustan maduritas. Pero parece que el hijo es de otra calaña y las prefiere cojitas, además de querer conocer la información por la cual parece que asesinaron a los padres de Shopie. Tal vez fue él el asesino.
Deborah es una espía a sueldo del padre y el hijo, y con el tiempo ha pasado de apreciar a Sophie a verla como una competidora.
Con este capítulo he podido aclarar muchas dudas. Ahora queda ver qué papel va a jugar Carlos en la trama, y por supuesto el desenlace.
Buena lectura, clara y reveladora para la novela. Enhorabuena.
Abrazos para las siete plumas.

Anónimo dijo...

El fiasco ha sido el partido, no diré que me alegro, pero casi.
Anabel, el capítulo es estupendo, aclara un montón de cosas, sobre todo a mi, que hasta que no me cuadra todo no paro, hacía falta contar la relación del padre de Jack, con la historia, como se metió Déborah en ésto, etc. Bueno hacía falta tu capítulo. Enhorabuena.

Ana J. dijo...

Bueno, bueno, bueno!
Qué buen capítulo!
Te has hecho de rogar, pero aquí lo tenemos, con una Deborah llena de contenido. Marcos ya dejó las miguitas de pan en el camino para redimirla y tú la haces humana, con sus miserias, con sus dudas y remordimientos pero incapaz de resistirse a la atracción que Jack ejerce sobre ella. Igual que él es incapaz de resistirse a la anormalidad, Deborah se ve abocada a resistir las humillaciones que su jefe le prodiga y la vergüenza de traicionar a sus amigas.
En el fondo, están hechos el uno para el otro, solo que sus caminos son paralelos. Quién sabe si en algún momento esos caminos harán una curva y se tocarán.
Ahora nos explicamos la cojera fingida y su ineficiencia. Dos piezas más que encajan en este .
También sabemos ya cuál puede ser el papel del padre de Jack, otro ser atraído por lo inusual (este no es tan rarito), aunque o creo que haber algo más que pura atracción por Amy.
Y nos recuerdas que los padres de Sophie guardaban un secreto tan importante como para que desaparecieran sin dejar rastro.
Magnífico.
Las piezas se van recolocando, los caracteres se aclaran, la intriga sigue servida.
Enhorabuena, Anabel. Me ha encantado

Anabel dijo...

Flamenco, gracias. Es halagador que mi capítulo te haya alegrado la tarde a pasar de la derrota futbolística.

Isolda, es que a mí me sienta mucho mejor el frío que el calor y por aquí han llegado los petardos de San Juan pero aún no el calor del verano. Gracias.

Mercedes, aún no tenemos la certeza de que los padres de Sophie hayan sido asesinados. De momento, los damos por desaparecidos. Gracias por tus palabras y por seguirnos.

María, bueno, ya ganaremos todos los demás partidos, seguro. Gracias, me gusta este papel de solucionadora de entuertos.

Ana, es que no pude subirlo antes. Ayer tenía la intención de acabarlo, pero se me complicó la tarde y por la noche tenía una cena. O sea, lo he tenido que acabar después de comer y subirlo. Todos habéis resaltado que es un capítulo aclarador. Me alegro porque esa era mi intención. Pensaba que había de atar algún cabo y desatar algún nudo pues la trama estaba muy densa. Ahora podemos continuar por otros cabos, como por ejemplo el personaje de Carlos Escobedo. Estuve a puntito de meterle mano a él. Lo tenía de reserva si Deborah no me satisfacía, pero era necesario aclarar ciertas cosas sobre la relación Deborah-Amy-Jack.

Gracias de nuevo a todos.

Amando Carabias dijo...

Esto es sólo para dar noticia de que lo he leído, de que me ha gustado, de que seguimos avanzando, de que a este paso me borro definitivamente del fútbol, de que me has tenido en ascuas todo el día y de que me voy a las otras habitaciones de la casa que requieren un pequeño retoque...
¿Por qué no me ha llegado al mail la entrada?
Bueno, es igual. Luego vuelvo.
Muye bueno Anabel. Pero eso ya lo sabíamos.

catherine dijo...

No tengo la excusa del partido porque ni siquiera veo los de Les Bleus. Me había ido de compras, nada más.
Dices que querías esclarecer varios puntos, es un éxito.
¿Es compartido por Amy el amor que a ella le tiene Thomas? Ya que entre Sophie y Carlos, Deborah y Jack hay problemas, que Deborah simula celos en cuanto a Carlos, que Sophie rechaza a Jack ( y a Edward?) ¡uf! y no digo uf por cansancio sino que me parece como la vida real y que explica muchos enlaces complicadísimos entre los personajes.
Es un capítulo muy bueno, Anabel, que ayuda mucho en la comprensión de varios hechos sin cerrar todas las puertas.
Besos para los 7 Plumistas, uno más para la cuentista.

Inma Vinuesa dijo...

Anabel, chapó, has hecho un capítulo ameno, con muchos diálogos que clarifican más la personalidad de Deborah y Jack, que nos da datos importantes del pasado de ambos. Está escrito con la inteligencia de meterte plenamente en cada uno, y utilizando frases y términos que nos avivan la imaginación y hace que tengamos más definida físicamente a Deborah y al intragable de Jack, con esa personalidad aplastante y dominante.
Bravo Anabel, que difícil lo tengo para el domingo.
Abrazos a todos

Ángeles Hernández dijo...

Me parece que después del susto que nos dio Marcos convirtiendo a Deborah en espía contratada por Jack y por su padre ( ¿por Jack el jefe de Sophie, el malo vicioso que tiene un corazoncito y que las chicas queremos salvar un poquito ¿Por su padre, quién es ése) has hecho un trabajo inmejorable Anabel.

He releído tu capítulo previo y fuiste tú la que nos introdujiste a Edward, al callejón de Cramond y a su terrible y traumático episodio. Aquella entrada a pesar de no ser tan pacífica como ésta también daba cierta luz sobre la vida anterior de Sophie y sus pesadillas. Desde entonces mucho habéis escrito, mucho, bueno, denso, coordinado y algo abigarrado.

Hoy has dejado de lado tu febril imaginación de cuentista para buscar una salida clarificadora a muchas incógnitas. Has conseguido, como vais haciendo todos, que la continuidad de la novela sea cada vez más firme, esforzándote por encontrar una explicación a hechos que, no habiendo salido de tu pluma has asumido como propios, para darles un sentido y una verosimilitud que permite a las demás (y también a los lectores impenitentes que nos permitimos el lujo de daros consejos o plantearos nuestras dudas y contradicciones) poder continuar con lo que parece ser ya claramente un hilo conductor.

A mi corto entender, el primer hecho de todo lo publicado hasta ahora, y el pretexto para su escritura, parece encontrarse en el padre de Jack y Amy la abuela de Sophie. Esta relación a la que yo que soy una romántica veo espléndida, es el origen, no de los terribles sucesos de la infancia de Deborah, pero sí de que la trama argumental que habéis ido construyendo, vaya por este camino en concreto. Queda todavía mucha tela que cortar, mucho secreto que desvelar, muchos personajes por analizar y comprender (todo se comprende cuando se conoce el por qué, ya veremos, Ed, Carlos...), y sobre todo queda llegar al fondo, al meollo de la novela: Los padres de Sophie desaparecidos y el ¿cómo?, ¿dónde? ¿por qué?, ¿a quién benefició su pérdida?, ¿en qué proyecto estaban metidos que atrajo al ejército, a Jack…? ¿Qué ocurrió tan importante como para dejar a su hija, previsiblemente a sabiendas y por ello con su porvenir organizado?.

Apuesto, además de por la intriga y el interés de lo que nos queda por saber, por la descripción de los personajes y sus circunstancias. Todo tiene una explicación y ellos nos la van a ir dando. En este capítulo en concreto, tanto Jack, como su padre, pero sobre todo Deborah, han sido sometidos a un riguroso análisis psicológico (empleando el diálogo y el soliloquio), coherente y serio que, a mi entender, es lo que a todos nos hace decir: “este capítulo aclara”.

Destaco al personaje de la tía buena (antes espía malísma y traidora) que quiere ser algo más que unas magníficas piernas y una mujer bandera en la que Anabel nos hace ver una persona normal , retrotrayéndose al motivo de la eleción de su profesión, hasta llegar a dejar claro por qué está donde está, con sus inicios bienintencionados, sus aficiones, dudas, adiciones, contradicciones , filias, fobias y desencanto. Quizás algo empiece a cambiar en su vida a partir de ahora.

Permitidme terminar este largo texto ( es que hay que ver cómo me enrollo), repitiendo una vez más mi satisfacción y admiración por lo que estáis haciendo. "Uno para todos y todos para uno" : Enhorabuena siete mosqueteros.

Y como no todo va a ser reflexión sesuda, os mando un abrazo muy muy fuerte a los siete y a los que como yo nos consideramos casi tan comprometidos con este plan, y CON EL PLAN DE VISITAR ESCOCIA.

(Si es queya sois como de la familia)

Anabel dijo...

Amando, te estoy esperando.

Catherine, es un lujo tener a gente como tú que nos sigue y apoya. Tu opinión es muy importante.

Inma, me he devanado los sesos un montón, pero si he conseguido mover un poquito más la rueda, ha valido la pena. Ánimo, has de comenzar la tercera ronda ya mismo.

Ángeles, esperaba tu análisis. Ya se habrá notado que el tema de la psicología de los personajes me gusta mucho, mucho más que la acción, aunque hay que estar a todo, nunca se sabe por dónde va a salir el capítulo.

Gracias a todos.

Yo me apunto al viaje a Escocia, of course.

Saludos, family.

FranCo dijo...

Tras este capítulo y el análisis que hacen la familia de este blog, me estoy plateando dejar de ser una de las plumas y disfrutar con la lectura, ser solo un lector. Felicidades Anabel, pareces una marinera atando cabos con maestría, este tipo de capítulos son como oasis que nos permiten repostar y entender la trama de la historia. Volveré a leerlo para aportar algo que no hayan tributado nuestros amigos y lectores.

Cuando nació este proyecto entendí de la importancia de personas/lectores/amigos que ayudaran con su punto de vista y análisis para poderlo llevar hasta el final. Pero nunca pude imaginar un grado de implicación tan fiel.

Anabel, voy a releerlo. Resumiendo: ME GUSTA.

Amando Carabias dijo...

Aquí estoy. Si es que tengo un jaleo. Encima avería en casa...
A lo que importa.
A mi modo de ver en este capítulo se ha 'salvado' a Deborah. Esa es la primera conclusión a la que llego. Se ha salvado en diversos sentidos.
El primero de todos, y el que más me interesa, como personaje, ya que parecía hace unos capítulos que no tenía trascendencia, ahora, sin embargo se me antoja la pieza clave... ¿Os imagináis un tercer jugador en una partida de ajedrez que juegue con una pieza que unas veces sea blanca y otra negra?
Puede volver loco a todo el mundo y a sí mismo también. Perfilas, dibujas, diseccionas a esta mujer bandera. Nuestra Jessica Rabbit de la que hablábamos el otro día ya tiene un pasado concreto. No es la vaporosa idea de cierta amistad, camaradería, investigación inconclusa con Sophie.
Y me da la impresión de que todavía encontraremos más sorpresas. Desde el primer día me pareció que sabe mucho más de todo y de todos. Puede resultar uno de los vértices de la novela.
Lo de Thomas, el padre de Jack, el jefe de Sophie, como dice también Catherine y Ángeles, ha resultado genial para ver otro aspecto de la historia.
Por lo que veo hace diez años pasaban muchas cosas entre Cramond y Edimburgo, hasta que un empresario (de momento y a falta de más datos lo dejaremos ahí) más que cicuentón se enamore de una mujer de sesenta y cinco años pero de muy buen ver, al menos para sus gustos. No me extraña que Viciosín nos saliera así, con semejantes antecedentes.
Ah, una duda... Bueno no sé si una duda o una corazonada: ese enfermero salidorro, ¿olía bien?
Un beso y de nuevo enhorabuena por el capítulo.

catherine dijo...

¿Qué quieres decir, Amando? ¿que huele a orina, que es la silueta que frecuenta la callejuela, el calvo que asusta a Ed? o ¿es que odias el olor de los hospitales?¿hay un olor particular en el geriátrico?
Ya que tenemos músicas particulares en ciertos capítulos ¿tendremos olores importantes? Y quien hará la banda olfativa simétrica a la banda sonora?
Lo cierto es que unos huelen muy fuerte a whisky o cerveza.

Amando Carabias dijo...

Pues sí, en ese estaba pensando. El olor de los hospitales es especial, pero no me parece desagradable, ni mucho menos. Un geriátrico no tiene tampoco por qué oler mal.
Y sí es curioso, además de melodías estamos consiguiendo aromas

Mercedes Pinto dijo...

Es cierto, perdón. Está manía mía de poner finales a las historias antes de que terminen... Habrá que esperar.

Anónimo dijo...

Os puedo asegurar que, un geriátrico, no tiene un olor "especial" ya se cuidan muy mucho, de que todo este en perfecto estado de revista. Y lo se por experiencia muy directa, aunque se perfectamente que la referencia que hacéis al olor, se refiere al personaje y no tanto al centro.

FranCo dijo...

Referente al olor de los geriátricos les diré que huelen diferente. No pretendo ser desagradable, pues me a tocado vivirlo y huelen diferente. Tengo familiares que no pueden soportarlo al visitarlos y casi vomitan.

No podemos negar que el olor de un bebé es diferente a un anciano de 80 años. Si lo multiplicamos por trescientos...

Es la vida, cruda pero la vida

Anabel dijo...

Mercedes, nada de perdón. Queremos que estés aquí para que nos des tu opinión. Te necesitamos. El hecho de que des por sentado que los padres de Sophie esten muertos nos aporta muchos datos sobre el lector. Al menos a mí. Es un "escape" de tu subconsciente, del lector que hay que tomar como un termómetro, como una pista. No digo que ahora los matemos -o sí-, digo que es muy interesante saber qué pasa por vuestras mentes mientras escribimos una novela. Esta ventaja no la tenemos normalmente. No sé si me he explicado. De todas maneras, me reitero: no hay nada que perdonar, sólo que agradecer.

Amando, sí, he revestido a Deborah de algo más que belleza y seducción. No tenía previsto dotarla de "humanidad", la verdad, pero el capítulo de Marcos me ha "obligado" a hacerlo. Y, de golpe, salió esta Deborah tan hermosa y fuerte y, a la vez, tan paradójica y débil. Una mujer. Respecto a lo del enfermero no había pensado en nadie en concreto. Ella está en un hospital donde la acaban de curar tras el accidente, no en un geriátrico. Bien es cierto que los que trabajan en estos campos suelen estar pluriempliados, pero no había pensado en Edd. Pero nuestra pluma es libre y cada uno escribe lo que le parece, así que todo podría ser.

FranCo, si yo soy marinera, tú eres el capitán del barco. Lo siento, sé que esto no te gusta, pero es así. Y permíteme que me ponga sargento: ni se te ocurra dejar de escribir.

Gracias de nuevo.

Dácil Martín dijo...

Uf, me ha gustado mucho. Ameno en la grandilocuencia de sus diálogos, conciliador de las impresiones que hasta ahora teníamos de los distintos personajes, y de sentido lógico en el transcurso de la historia. Aunque hablar de un sentido lógico en el mundo imaginario de la literatura resulte contradictorio. Sin embargo, es uno de los valores añadidos del texto, el denominador común con los demás capítulos de las 7 plumas: enlazarse en la historia de Sophie.
También me ha violentado el despotismo de Jack al llamar "bonita" a Deborah, y ella lo aguanta. De ahí mi pregunta: ¿quién será más sumisa, Deborah o Sophie?
A su vez Deborah describe a Sophie como una ilusa: ¿la infravalora por los celos, por ignorante, o por lo contrario, por saber demasiado? ¿Hasta dónde alcanza la información que acapara Deborah?
Y seguiríamos hablando... , pues son muchos los hilos que has dejado para los que venimos detrás.
Felicidades. Un abrazo.

Anabel dijo...

Dácil, tienes razón en todas las preguntas que haces. Parece que la sumisa sea Deborah que aguanta la bravuconería de Jack sin rechistar. Sin embargo, me gustaría hacer constar algunos matices que me parecen importantes en esta nueva Deborah.

-¿Es Deborah realmente dócil? De momento no sabemos cuál es su actual relación con Jack. Está claro que ella lo aguanta por dinero y porque siente por él una obsesión insana, pero ¿han tenido relaciones alguna vez? ¿Ha tenido que pararle los pies a Jack en alguna insunuación de las suyas? Es decir, ¿ha cedido Deborah? Eso aún no lo sabemos.

-¿Tanto la desprecia, sexualmente hablando, Jack? Esta cuestión entroncaría directamente con la anterior y sería respondida a la vez. A mí no me cuesta imaginar a Jack tirándole los tejos a Deborah aunque ésta no reuna su canon de belleza.

-¿Por qué opina Deborah que Sophie es una ilusa? Para mí es evidente: Sophie aún no se ha enterado del doble juego de Deborah. Eso, por un lado, por otro, Deborah tiene mucha información, no sería de extrañar que incluso más que la propia Sophie. Añadamos a esto la atracción que siente Jack por ella y de la que parece ser la única que no lo sabe.

Opino como tú que he aclarado algunas cosas, pero se ha abierto un campo de relaciones muy intrincado que puede aportar la pimienta a una historia de misterio e intriga.

Ahora le toca a Inma guiarnos por esas historias.

Gracias, Dácil.

Marcos Alonso dijo...

La verdad que a medida que uno vuelve a leer el texto se da cuenta de la riqueza de matices que tiene. A mi me encantó, en todos los aspectos, pero tengo que reconocer que cada vez odio más al Jack ese, por mucho que ustedes, las chicas, quieran reconvertirlo y redimirlo de sus pecados. No entiendo como Déborah cae en sus redes, aunque ella reconoce su torpeza "soy una estúpida/ imbécil..." En realidad se ve desconcertada,al ver como sus poderes/cualidades (belleza, carácter..) no le funcionan con Jack, eso mismo le atrae de él
"sólo se enamoraba de quien menos le convenía, de aquellos que no se quedaban embelesados mirándome el culo", "que su belleza no significaba nada", "..él no buscaba la perfección ...sólo le excitaba la malformación y la sumisión" Por tanto Déborah no es sumisa "...Ella carecía de las dos cosas (malformación y sumisión)".

Sin embargo, a esta chica, le atrae mucho Jack, su carácter varonil... y parece haber caído en sus redes "... tardaría unos años en darse cuenta que no había sido un piropo ("tienes unas piernas perfectas)".

Lo tengo claro, este Jack es un enfermo , mira que preferir a otras antes que mirarle el culo a Déborah, sinceramente, no lo entiendo.

Dacil martin dijo...

Marcos, Deborah te puede. No me extrañaría que la próxima vez que te enfrentes con Jack pueda haber más que palabras...

Amando Carabias dijo...

Dácil con quien va a tener un encuentro y con quien va haber más que palabras es con Deborah...
Claro que lo mismo alguien se le adelanta... Y es que opino casi como él. No entiendo que véis en Jack, salvo que sea tan varonil, esa mirada, esa..., bueno esa...

Ángeles Hernández dijo...

De momento Jack ha tenido un momento de gloria cuando descubrió la libreta de Sophie.
De vosotros depende que sea un malvado absoluto o que, como todo el mundo tenga su parcelita bondadosa o al menos agradable.

La verdad es que hasta ahora se nos presenta absolutamente detestable. Más que ver algo en él creo que deseamos verlo.

¿Qué pluma se anima a sacarlo del pozo diabólico?. Con esa capacidad que tenéis para la cración seguro que alguna nos lo redime un poquito, como Anabel a Deborah.

FranCo dijo...

Gracias Marcos por incidir en "... tardaría unos años en darse cuenta que no había sido un piropo ("tienes unas piernas perfectas)".

Lo había pasado por alto. La grave enfermedad del calvo. Ahora sí. EStaba espeso.

Ángeles Hernández dijo...

Es verdad que ese final crea inquietud. Son tantos los matices, Anabel, que esta vez sí que el bosque de la tranquilidad nos eclipsó muchas pistas que has ido sembrando y que ahora vamos recogiendo.

Decir que unas piernas son perfectas no es un piropo, es una realidad que a Jack no le entusiasma. Quien le vuelve loco es "la cojita".

Gracias Marcos y Fran. ( No estás espeso, es mucha informcaión de una vez)

Anabel dijo...

Creí que el final iba a dejar muchas cosas claras en la personalidad de Jack. Bien se vale que Marcos estaba atento.

He de deciros que aún podemos redimir a Jack. Aún.

Vale por hoy que mañana madrugo y mira qué horas...

Saludos.

Anónimo dijo...

Me llama la atención, los pocos comentarios que ha suscitado este capítulo, supongo que será por vuestras ocupaciones respectivas, que no por la falta de interés del mismo. Para mi, los capítulos que aclaran la trama de la novela, son fundamentales para su comprensión y este aclara y da sentido a muchas dudas que habían surgido.
Mientras espero impaciente a que llegue el domingo... Besitos.

La Esfera dijo...

Llevas razón, María. Yo me sumo al pelotón de los agobiaos. A duras penas puedo leer los comentarios, digerirlos y procesarlos junto con el texto.
Pero hay algo que para mí está claro y veo que para el resto, no y, como el error está siempre en el que emite la información, no en el que la recibe, voy a dar mi punto de vista, por si sirve.
Evidentemente, Jack es un tipejo. Pero un tipejo con sentimientos y, yo diría, encontrados con su deseo sexual.
Yo no creo (o no lo escribí pensando en ello) que Sophie deje el cuaderno para que él lo encuentre, sino que es una casualidad.
También creo que Jack siente algo muy profundo (e inconfesable incluso para él mismo) por Sophie, también más allá de su interés por lo que sucedió con los padres de Sophie.
Lo argumento:
1º. Cuando está dudando si abrir el cuaderno o no, salta del disco donde suena Worlds collide a la canción de Metallica "Nothing else matters" y recuerda la letra de la canción original: So close, no matter how far (Tan cerca, sin importar lo lejos que estemos). Reconozco que no fui muy explícita, pero a música de la balada y esa referencia querían sugerir unos ciertos sentimientos por la dueña de la libreta que casi adora antes de abrirla.
2ª. El hecho de que no se abalance a ver el interior es casi incompatible con su obsesión por conocer información respecto a los padres de Sophie. Quiere conocer lo que esconde ELLA, no sus padres. Y se sorprende de encontrar esos recortes. Evidentemente, la historia ha girado hacia otros intereses de Jack hacia Sophie pero yo quiero seguir creyendo que, a su chulesca manera, siente algo más profundo por Sophie.
A mí me encantaría dotarlo de una personalidad, al menos, llena de matices, "sacarlo del pozo diabólico", como dices, Ángeles, pero veo que va a ser misión imposible. Ya me había resignado pero, puesto que sacas a relucir el tema...
Otra cosa. Como Mercedes, a mí los padres de Sophie siempre me han olido a muerto. Tantos años desaparecidos, un secreto tan importante (creo que sería importante que no nos olvidásemos de la referencia que hizo Marcos a los militares), tanta gente detrás de ellos... solo pueden estar muertos o perdidos en algún lugar de la isla de Lost.
Evidentemente, estarán vivos o muertos según se decida, pero así es como lo veo.
También me encantó la frase final, la de las piernas perfectas. Creo que es un final redondo, en forma y en fondo, para un capítulo intenso, interesante y especialmente bien escrito.

Anabel dijo...

Sí, señora, has entendido mi "aún" referente a la redención de Jack a la perfección. Veo que tú y yo tenemos el personaje de Jack muy claro con todas sus sombras y luces. Creo que podemos sacar mucho jugo de ese Jack y de sus relaciones con Sophie y con Deborah. Hay algo "pendiente" entre Jack y Deborah que áun no ha salido a la luz, pero que puede salir. Y en lo referente a lo que siente por Sophie, totalmente de acuerdo. Creo que él sufre por Sophie la misma obsesión que Deborah sufre por él. Pero las cosas cambian...

Respecto a los padres de Sophie está claro que pueden estar muertos, lo que sucede es que en ningún sitio lo hemos dicho de forma patente. Ahora se me ocurre una cuestión: aquí en España hasta que no han pasado 10 años de la desaparición de una persona no se la puede dar por muerta. ¿Sucede lo mismo en Gran Bretaña? Si es así, legalmente los padres de Sophie están o van a estar muertos legalmente hablando. Otra cosa será cómo queremos los 7 Plumas que estén. Es decir, legalmente la situación cambiará y supongo que muchas cosas pueden salir a la luz si hubiera testamento, o bienes, o una caja fuerte...

Son sólo ideas, apuntes, sugerencias en mitad de la noche.

Todos tenemos obligaciones y tanta información puede ser difícil de asimilar. Hemos de darnos tiempo. Poco a poco, no hay prisa.

Saludos.